Hace un año Magdalena, de 18 años, se inició como trabajadora sexual. Ella asiste a controles mensuales en el área de Salud 7 y dice que aún hay hombres que se niegan a usar el condón y a cambio le ofrecen más dinero.

“Hay unos que no lo quieren, yo les digo que no porque hay enfermedades y me las pueden pasar a mí”, señala, pero agrega que ellos pagan y no se usan.

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El gineco-obstetra Roberto Jambay, del área de Salud 7 que atiende a trabajadoras sexuales, menciona que “no hay una que no use el condón,” asegura Jambay, en cuyo consultorio después de la cita médica se les entrega una orden para retirar 15 condones en farmacia.

El especialista también atiende a amas de casa, entre las que ha observado infecciones vaginales como candidiasis. “Cuando la infección no desaparece, ahí se observa que puede haber una tercera persona”, dice él.

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El coordinador del Programa VIH/sida del Departamento de Epidemiología de la Dirección Provincial de Salud, Luis Alberto Mena señala que desde el 2006 el Ministerio de Salud Pública trabaja en la entrega y consejería sobre el uso del condón en esta provincia.

Sin embargo insiste en que todavía a la mujer se le hace difícil decirle a su pareja que utilice un condón.

“A veces a una mujer negociar con su pareja el uso del condón le resulta difícil y el hombre todavía sigue creyendo que no es lo mismo el hacerlo con preservativo o sin preservativo, sin pensar que para él es una seguridad”, dice Mena mientras agrega que no solo se trata de prevenir un embarazo sino de cualquier enfermedad sexual.

Mena señala que en las 240 unidades de salud en Guayas, a cada persona que se le entrega el condón se le da una consejería previa, “porque sino el paciente no lo usa”.

La responsable de consejería del programa de VIH, Acela Trujillo, dice que para evitar enfermedades de transmisión sexual hay opciones como la abstinencia, la fidelidad y en el último de los casos el condón.

Trujillo menciona que el condón femenino, el que se prevé entregar desde el 2011, da mayor protección a la mujer porque además de ser suave y blando se adapta a la cavidad vaginal, que la protege en un 100% de manera interior y exterior.

“Cubre los labios menores y mayores de la vagina y la protege de la base del pene”, sostiene Trujillo.

La especialista señala que el año pasado el Fondo de las Naciones Unidas les ofreció gratuitamente el preservativo a las trabajadoras sexuales.

Según Trujillo, el condón femenino se lo puede poner ocho horas antes de iniciar la relación sexual. El costo oscila entre $ 8 y $ 10.

Por eso Trujillo menciona que el Ministerio de Salud está haciendo gestiones para repartir el condón a los grupos que tienen más riesgo como las parejas que tienen VIH, las trabajadoras sexuales, hombres que tienen sexo con hombres.

Según la consejera este condón también puede ser utilizado para tener sexo anal.

Mena sostiene que las embarazadas y los adolescentes no suelen utilizar el condón, por eso en las jóvenes se registra más del 20% de embarazos.

Trujillo dice que actualmente la única barrera para que las mujeres tengan el condón femenino es el precio.

Trabajo
El coordinador del Programa VIH/sida del Departamento de Epidemiología de la Dirección Provincial de Salud, Luis Alberto Mena, indica que desde el 2006 a los pacientes que acuden a consejería se les entrega 20 preservativos.

Entrega de condones
Mena señala que esta es una normativa del Ministerio de Salud Pública y durante el 1 de diciembre se entregó un mayor número.