Con la primera canción de la noche, Valió la pena, se comenzó a disfrutar de un concierto que puso a bailar a la gente durante hora y media. Eran poco más de las 22:30 en el estadio Modelo Alberto Spencer y se escucharon los acordes de ese tema. El público colmó el espacio con gritos, y un salsero vestido con una camisa blanca cubierta con sus característicos terno y pantalón negros, salió al escenario. Era Marc Anthony.

“Mirándote a los ojos se responden mis porqués, / me inspiro en tus palabras y mi casa está en tu piel...”, coreaban los seguidores del boricua. Un juego de luces correteaba por el escenario, y la algarabía y emoción de la gente se mostró cuando se interpretó el coro de este tema: “Valió la pena lo que era necesario para estar contigo, amor...”.

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El cantante recibió del público una camiseta de la Selección, al igual que un ramo de flores rojas, que lo recogió y olió. Demostraba también su talento para bailar. Lanzaba besos a sus eufóricos seguidores. Anthony se metía rápidamente al público en el bolsillo.

La fiesta siguió cuando de inmediato interpretó la canción Contra la corriente: “Yo trato, trato, trato, pero no te olvido, / yo lucho, lucho, lucho, y no lo consigo...”, coreaba con efusividad el público, mientras Marc Anthony recogió un sostén negro que fue lanzado a sus pies. Con picardía lo besó y las féminas enloquecieron.

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“Buenas noches. ¡Qué chulos que son! Que Dios los bendiga”, expresó el cantante de origen puertorriqueño a sus fanáticos, que deliraron cuando empezó a escucharse el ritmo de Hasta ayer, “una canción muy importante para mí”, dijo Anthony antes de interpretarla.

Con un “¿Están listos para bailar? ¡Check it out, baby!”, procedente del cantante, se dio paso a una de las canciones más disfrutadas de la noche: Vivir lo nuestro. “En un llano tan inmenso, tan inmenso como el cielo, / voy a podar un jardín, para que duerma tu cuerpo...”, era interpretado por todo el estadio.

Marc Anthony se dirigía constantemente a una carpa blanca que estaba al lado izquierdo sobre el escenario. Organizadores aseguran que ahí estaban sus hijos, Cristian y Ryan, que tuvo con la ex Miss Universo Dayanara Torres.

“¿Cómo la están pasando? ¿Bien?”, inquirió el artista, quien recibía gritos como “¡Te amamos, Marc!, ¡te amamos!”. Así, un grupo de mujeres de la primera fila atrajo su atención y él les lanzó besos.

Una romántica melodía sonó después. Anthony interpretó en balada su canción Ahora quién. Y continuó con otros de sus temas, entre ellos Qué precio tiene el cielo, que fue aprovechado por las parejas para demostrarse sus sentimientos.

Una hora después de haber salido al escenario, cantó su primer y único tema de Íconos, su más reciente trabajo discográfico: Hasta que te conocí, del mexicano Juan Gabriel. Y retomó sus canciones con Nadie como ella.

Luego se sintió al desaparecido Héctor Lavoe con Mi gente. Desde sus asientos, el público bailaba. Era una noche para disfrutar al máximo. De ahí se escuchó Te conozco bien. Y terminó su repertorio a las 00:10, con Tu amor me hace bien, disfrutado por un público que estalló de emoción al escuchar a su ídolo de la salsa, Marc Anthony.

“Fue muy emotivo el show. Vine desde Portoviejo para escuchar a Marc y no me arrepiento. Lo disfruté bastante”.
Vicenta Azúa, asistente