EFE
SAO PAULO, Brasil.- Los cincuenta años de vida artística del cantautor brasileño Roberto Carlos, uno de los íconos de la música latinoamericana, están reunidos en una exposición en Sao Paulo, Brasil, que muestra distintas facetas de su vida y carrera.

El medio siglo de vida musical de O Rei (el Rey), considerado el más popular de los artistas brasileños, ocupa desde el pasado viernes cuatro pisos de la Oca del Parque Ibirapuera, un centro de exposiciones diseñado por Óscar Niemeyer.

Publicidad

La muestra, ideada por el propio cantautor hace ocho años, forma parte de la programación por la celebración del medio siglo de su vida artística, que incluye una gira con conciertos, un especial televisado, en el que canta con mujeres, y un crucero por el Atlántico.

Al son de las románticas baladas que se escuchan por todos los rincones del espacio, la exposición reúne los autos clásicos usados por Roberto Carlos en sus filmes y videos, incluido el cacharrito, que inspiró la canción del mismo título.

Publicidad

Las motocicletas, los pianos, su primera guitarra, trofeos y varios atuendos del artista son exhibidos en vitrinas y pasillos. No solo los seguidores del movimiento musical de la Joven Guardia, que cautivó al público en las décadas del sesenta y setenta, han ido a ver la muestra, sino también las nuevas generaciones devotas del artista.

"Crecí escuchando las canciones de Roberto Carlos que ponían en la radio mi mamá y mi abuela. No es una cuestión de herencia, es de gusto. Esta muestra nos trae cosas que no sabíamos de él o que las sabíamos pero no las conocíamos", comentó la joven Luzia Nonato, quien forma parte del club de seguidoras del artista.

Siempre hermético en su vida personal, Roberto Carlos abrió esta vez parte de esa faceta a su público con la exhibición de algunos recuerdos familiares, como fotos y diplomas.

Marcado por un accidente ferroviario en su infancia en el que perdió la pierna derecha, y después por la muerte de su tercera esposa, María Rita, en 1999, Roberto Carlos, nacido en 1941 en Cachoeiro do Itapemirim, estado de Espíritu Santo, es toda una leyenda viva para los brasileños, que cada final de año corren a las tiendas para comprar sus nuevos discos.

Su inconfundible voz ha trascendido las fronteras nacionales y es el brasileño que más discos ha vendido en el mundo, con 120 millones de copias.

El cariño de sus admiradores no podía faltar en la exposición, en la que también hay una sección dedicada a regalos del público. Se recrea un estudio de grabaciones y un paisaje de Río de Janeiro, su ciudad de residencia, que se puede ver desde la réplica de la cabina de barco, con la panorámica del mar.

Una sala de cine en la que se exhiben filmes y documentales también está en la exposición que, según los organizadores, recibió en su primer fin de semana unos 7.000 visitantes.

Mensajes de íconos de la música brasileña como Erasmo Carlos, Tom Jobim, Caetano Veloso y María Bethania, así como de numerosas figuras del mundo del espectáculo son otro atractivo para los visitantes.

La discografía completa, en portugués, español, italiano, francés e inglés, se encuentra digitalizada y a disposición de los visitantes, en cabinas donde pueden dejar mensajes para su ídolo. Un karaoke con la canción Eu quero apenas (Un millón de amigos) permite la interacción entre el público y el artista.

La exposición, que permanecerá hasta el próximo 9 de mayo, puede verse de martes a domingo. Estuvo abierta el lunes pasado por el Día Internacional de la Mujer, debido al cariño que le profesa Roberto Carlos al público femenino.

"Crecí escuchando las canciones de Roberto Carlos que ponían en la radio mi mamá y mi abuela. No es una cuestión de herencia, es de gusto. Esta muestra nos trae cosas que no sabíamos de él o que las sabíamos pero no las conocíamos".
Luzia Nonato,
miembro del club de fans del cantante