La prensa nacional ha mostrado la desolación que el verano ha causado en el agro del país. Campos yermos y animales muriendo de hambre y sed. La solución, sin embargo, es simple y puede estar al alcance de cada campesino o ganadero, grande o chico.

El nopal forrajero (tuna forrajera) es una planta que puede almacenar agua y alimentos para tiempos de sequía, sin sufrir mayormente la falta de riego, constituyéndose así en la salvación  del ganadero y sus animales, ya que les provee tanto de agua como de alimento hasta que lleguen las lluvias y crezca el pasto.

Es una noble planta sin exigencia de suelo, riego o cuidados. Puede crecer en cualquier tipo de suelo y se la encuentra tanto a nivel del mar como en las alturas de la Sierra o valles.

Publicidad

Cuál es la idea entonces? Que cada ganadero siembre, ya aprovechando las lluvias, al menos una hectárea de tuna forrajera, con una población de diez mil plantas por hectárea,  y tener para el próximo verano comida y agua suficiente para el ganado; esto no solo salvará a los animales, sino que mantendrá la producción tanto de carne como de leche sin mayor variación.

Con esto, el productor ganadero dejará de mendigar la ayuda del Gobierno (que siempre tarda y nunca llega a tiempo) y dependerá de sí mismo.
Esta planta además puede servir para programas de reforestación de sitios áridos, con un propósito múltiple: fruta para exportación, reforestación, forraje para el ganado...

Luis Gavilanes E.,
doctor, Machala, El Oro