El país ibérico revalidó el título al vencer este sábado a la República Checa en el partido de dobles y tomar una ventaja insuperable de 3-0 en la final.

Feliciano López y Fernando Verdasco vencieron 7-6 (7), 7-5, 6-2 a Radek Stepanek y Tomas Berdych en el partido decisivo jugado sobre cancha de arcilla en el Palau Sant Jordi.

Publicidad

España, que ganó su cuarto título desde 2000, es el primer país desde Suecia en 1998 que consigue la Ensaladera de Plata en años consecutivos. El año pasado superó en la final a Argentina.

España aprovechó los problemas de Berdych en su saque para tres de sus cuatro quiebres.

Publicidad

Stepanek dejó una pelota en la red en el punto de partido y España se coronó en el mismo escenario donde ganó su primer título hace nueve años.

López lanzó su muñequera al príncipe Felipe después del partido y la banca se vació en medio de gritos de Campeones!.

No esperábamos ganar así de rápido, dijo el capitán Albert Costa. La clave de este equipo ha sido su unidad.

España es ahora el sexto país más exitoso en los 108 años de historia del torneo, después de Estados Unidos (32 títulos), Australia (28), Francia y Gran Bretaña (9) y Suecia (7).

El capitán checo eligió a Berdych y Stepanek, que tenían marca de 5-0 en dobles de Copa Davis, en lugar de la pareja original de Lukas Dlouhy y Jan Hajek.

Berdych perdió el viernes en sencillos contra Rafael Nadal, y Stepanek desperdició una ventaja de dos sets al caer ante David Ferrer en un duelo de cuatro horas.

España ha ganado 20 series consecutivas sobre canchas de arcilla y está invicto como local desde 1999.

Ellos merecían ganar la serie, comentó Berdych. Definitivamente fuimos segundos en la mayoría de las cosas que pasaron hoy en la cancha.

El primer set fue decidido tras un largo intercambio entre Verdasco y Berdych, que tuvieron problemas con sus servicios en la primera manga.

Los checos salvaron tres puntos de set antes de tener uno a su favor, que López rescató con una volea en la red.

Ese fue el punto clave, indicó Berdych.

Los checos jugaron su tercera final y primera desde que Ivan Lendl condujo a Checoslovaquia al título en 1980.

Estamos contentos con la temporada porque habían pasado muchos años desde nuestra última final, dijo Navratil. España es muy fuerte, muy difícil. Tengo que felicitar al equipo español por esta victoria.