En medio de estrictas medidas de seguridad se realizó ayer la asamblea extraordinaria de socios de Barcelona, que convocó el directorio que encabeza Eduardo Maruri.

El evento, que se realizó en el Centro de Convenciones Simón Bolívar, comenzó con un retraso de una hora (19:00) y no como estaba previsto a las 18:00 por falta de quórum (no existió la mitad más uno de asistentes  como establecen las normas).

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Ante aquello, la sesión comenzó con la presencia de 182 socios, de los 800 que estaban habilitados para participar en el acto. Durante la intervención del titular canario, los hinchas mostraron su inconformidad por la gestión que realiza la actual dirigencia amarilla.

Esto molestó en más de una ocasión al presidente Maruri, por lo que amenazó con dar por terminada la reunión si continuaban las interrupciones.

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E, incluso, Alfonso Harb, titular de la Comisión de Fútbol, se molestó con un hincha y le hizo reclamos airados. Sin embargo, los ánimos se tranquilizaron luego de que Harb pidiera disculpas al ofendido.

Los socios habilitados para la asamblea exigieron a Maruri cambios en el aspecto deportivo e incluso se mostraron en contra de los cuatro puntos establecidos en la agenda: Plan estratégico, Plan de objetivos deportivos, objetivos en el plano administrativo y financiero (relacionados con la gestión de la empresa española Media Pro),  auditorías y el último se refería a ratificar la destitución de Luis Noboa de la vicepresidencia de los amarillos.

Algunos aficionados se fueron molestos de la convocatoria hecha por Maruri y la calificaron como “amañada”.

“No puede ser posible que el señor Maruri nos diga que vamos a tener un estadio moderno con pantallas gigantes. Queremos que nos hable del equipo de fútbol y no de tonterías”, dijo un aficionado.

Sesión
Hasta el cierre de esta edición,  todavía se trataba en la cita el cuarto punto de la agenda establecida.

Sin prensa
Por disposición de la dirigencia canaria, los representantes de los medios de comunicación no pudieron ingresar a la asamblea amarilla.