El cineasta italiano Giuseppe Tornatore (quien dirigió Cinema Paradiso en 1988) abrió ayer oficialmente la 66ª edición del Festival Internacional de Cine de Venecia con su película Baaría, un repaso por la Italia del siglo XX que no escapa al humor popular.
El filme, que narra la vida de un niño de Bagheria, la localidad natal del propio director, aborda el devenir de Sicilia y, en general, de toda Italia, durante el pasado siglo: desde el fascismo hasta las revoluciones sociales de los años sesenta, sin olvidar la II Guerra Mundial . Y todo, tocando los más diversos géneros cinematográficos, desde el humor hasta el drama, la política o la fantasía para llevar a la pantalla una historia que cuenta en el reparto con la actriz española Ángela Molina, quien da vida a la suegra del protagonista, Peppino.
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“El filme no es solo Sicilia. La idea era contar con un coro de personajes en el interior de un microcosmos de un pueblo y hacer sentir el eco de lo que sucede alrededor”, comentó el propio Tornatore durante la rueda de prensa de presentación. “Es una alegoría de todos esos lugares en los que todos hemos nacido”, añadió el autor de Cinema Paradiso (1988).
La historia comienza en la dictadura fascista de Benito Mussolini en Italia, para después narrar el devenir del protagonista, ya adulto, miembro destacado del Partido Comunista italiano (PCI) en Sicilia.
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La política y el sentimiento de pertenencia a una comunidad serán los hilos conductores del filme, con el que su autor quiere recuperar valores ya perdidos en la Italia de hoy y en el que la presencia de la mafia es abordada casi de soslayo. “Estaría bien que se recuperara el sentido del deber de enseñar a nuestros hijos lo que es importante. Son temas que se han perdido, incluso, en nuestra política”, agregó.
El cineasta ofrece al público una obra cargada de numerosas situaciones basadas en el humor popular y la particular forma de ser de la Italia del sur. Esas situaciones son las que llevan a la película, con 25 millones de euros de presupuesto, a parecer una sucesión de escenas cómicas, para dar paso a una mayor carga emocional y vital en la multitud de personajes que la componen.
Todo convergerá en un sorprendente final en el que caben múltiples interpretaciones y que aporta un inesperado toque de fantasía a esa realidad histórica que golpeó a Italia y a toda Europa, durante el pasado siglo.
“Yo tengo una definición cinematográfica simple para la película. Espero que pueda ser útil para promover una reflexión sobre el papel que la izquierda ha jugado en muchas ocasiones”, dijo Tornatore.
La música de Baaría, película producida por Medusa Films, perteneciente al primer ministro italiano Silvio Berlusconi, es obra de Ennio Morricone, quien participó también este miércoles de la presentación del filme.
Morricone, ganador de un Oscar Honorífico en 2006, explicó que esta cinta es una nueva muestra de la buena sintonía que tiene con Tornatore, con quien, aseguró, siempre ha coincidido en su forma de pensar.
Baaría, que concurre en la sección oficial del festival, será una de las grandes protagonistas de la ceremonia inaugural de la Mostra de esta tarde, que está previsto que comience a las 19:00 hora local (17.00 GMT) y que será conducida por la italiana María Grazia Cucinotta.