Tras sus incursiones en El abrazo partido y Derecho de familia, el director y guionista argentino Daniel Burman indaga hábilmente de nuevo en el núcleo familiar con El nido vacío, una comedia melodramática con ingredientes judíos, muchas neuras argentinas y secuencias surrealistas. Un estreno definitivamente insoslayable que le valió a su intérprete principal, Óscar Martínez, la Concha de Plata en San Sebastián.