Ecuador asumió la presidencia pro témpore de la Unión de Naciones Sudamericanas (Unasur) con el reto de consolidar la integración regional en medio de serias diferencias entre algunos de sus países miembros. Incluso con presagios de “vientos de guerra”, como lo señaló el lunes pasado el presidente de Venezuela, Hugo Chávez, en la reunión ordinaria del organismo en Quito.