La familia de la primera dama francesa, Carla Bruni, vendió su castillo de Castagneto Po, en la provincia de Turín, en el norte de Italia, al príncipe saudí Al Waleed Al Saud por 17,5 millones de euros (poco más de 19 millones de dólares).
El castillo, propio de un cuento de hadas y que pertenecía a la familia Bruni Tedeschi desde 1952, pasará ahora a manos del decimotercer hombre más rico del mundo, que es propietario de un importante paquete de acciones de la empresa de telefonía Motorola y de la entidad City Bank, según un artículo del diario La Stampa.
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El castillo era propiedad de una sociedad de la que formaban parte la modelo, su hermana Valeria y su madre Marisa Bruni Tedeschi.
“Ya no vamos a Castagneto”, manifestó previo a la venta Marisa Bruni Tedeschi, cuando afirmó que el castillo contaba con un jardín “mejor que el del Elíseo”, en Francia.
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El castillo del que se ha desprendido la familia Bruni tiene 40 habitaciones, y con anterioridad ya había sido puesto a la venta, a través de una subasta en la casa londinense Sothebys, el preciado mobiliario del edificio.
En aquella ocasión el valor de la operación ascendió a 7,2 millones de libras, unos 10,6 millones de euros, que se destinaron a la fundación creada en honor al hermano de la modelo, Virginio, quien murió en el 2006.