Cuando el bronce ya no se limpia
¿Tiene alguna lámpara de bronce o alguna otra pieza de este metal que ya no se limpia a pesar de todos sus esfuerzos? Si no quiere deshacerse de ella, píntela con esmalte para automóviles de los que vienen en aerosol. Aunque ya no se sabrá que es de bronce, el resultado la dejará complacida, pues se verá muy bonita.

Tartas al horno
¿Quiere evitar que las conchas de las tartas o pays se encojan al cocerse? Después de que las haya colocado en los platos y antes de meterlas al horno, hágales perforaciones con los dientes de un tenedor, tanto en el fondo como a los lados. Los diminutos agujeros evitarán que la concha pierda su correcto tamaño. Y no crea que esas perforaciones van a estropear el  aspecto que usted busca en sus tartas, pues luego de cocida la concha ni siquiera se notarán los agujeros de los dientes del tenedor.

¿No encuentra la orilla de la cinta?
Muchas veces, cuando al tratar de sacar un pedazo de cinta adhesiva transparente del rollo no se encuentra la punta, algunas personas se desesperan y tratan de hacerlo usando un cuchillo. No recurra a este sistema, solo lograría romper varias capas de la cinta, arruinando así un buen tramo de rollo. Esto mismo suele pasar cuando la cinta se rompe y se pierde la punta; sin embargo, es muy sencillo solucionar este problema. Deje caer el rollo en agua caliente. En unos segundos quedará asombrada.

Filete al horno
Si no lo ha comido en esta forma, pruébelo, es delicioso. Póngalo en el horno precalentado a 350° F y déjelo que se cueza  unos 20 minutos. Todo depende de lo grueso de la pieza. Sazónelo al gusto antes o después de horneado. Yo lo rocío con sal de cebolla y le pongo encima pedazos de mantequilla antes de meterlo al horno. Si le gusta con cebolla, fríala y cuando ya esté cocido el filete, póngasela por encima. Si lo quiere dorado, métalo unos segundos bajo el asador.