El general (r) Frank Vargas Pazzos, quien fuera jefe del Comando Conjunto en la época del fallecido presidente León Febres-Cordero (LFC), se precia de ser un rebelde, defensor de la dignidad humana desde que tenía 12 años, cuando le pegó dos tiros con una escopeta a un inspector del colegio que lo insultó. También de haber estado preso más de diez veces, la primera, por protagonizar un levantamiento en el Colegio Militar en 1954.