El cardenal Antonio González Zumárraga, el único purpurado de la Iglesia Católica ecuatoriana, murió esta mañana a los 83 años afectado por un cáncer, confirmó la Conferencia Episcopal.
González, arzobispo emérito de Quito, falleció en la capital ecuatoriana tras una larga convalecencia que lo obligó a limitar sus apariciones en público.
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Sus restos están siendo velados en la Catedral Metropolitana, en el centro histórico de Quito, donde serán inhumados mañana en la cripta de este templo.
Los obispos ecuatorianos reunidos en Roma con el papa Benedicto XVI "han pedido a Dios para que sea acogida el alma" del cardenal, agregó la institución.
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González Zumárraga nació en Pujilí, provincia de Cotopaxi, el 18 de marzo de 1925 y fue ordenado sacerdote el 29 de junio de 1951.
Estudió en el Seminario Mayor San José de Quito y en la Pontificia Universidad Eclesiástica de Salamanca (España), en donde obtuvo el título de Doctor en Derecho Canónico.
Vida religiosa
Fue consagrado Obispo el 15 de junio de 1969. En marzo de 1976 fue nombrado Administrador Apostólico de Machala (costa ecuatoriana), y en enero de 1978 fue nombrado obispo de esa misma diócesis.
El 28 de junio de 1980 fue trasladado a Quito como Arzobispo Coadjutor.
El 1 de junio de 1985 asumió el cargo de Arzobispo de Quito, como sucesor del señor Cardenal Pablo Muñoz Vega. Es el duodécimo Arzobispo de Quito.
Fue Presidente de la Conferencia Episcopal desde 1987 hasta 1992. En 1995, el Papa Juan Pablo II lo nombró Primado del Ecuador, como Arzobispo de la Iglesia Metropolitana de Quito.
Fue nombrado cardenal el 21 de febrero de 2001.