De su cuadro Impresión, sol naciente se desprende el nombre del estilo pictórico del cual es su máximo representante, el impresionismo. Se trata del artista francés Claude Monet, a quien se lo puede reconocer como el pintor de la luz, del agua, pero, sobre todo, del instante.

Esta obra, elaborada en 1872 en óleo sobre lienzo, que mide 48 x 63 cm y se exhibe en el Museo Marmottan, París (Francia), circulará mañana a modo de afiche con Diario EL UNIVERSO, dentro de la colección Grandes Maestros del Arte.

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Impresión, sol naciente se convirtió, como dice el crítico Pierre Daix, “en un espectáculo naciente con su frescura desconocida y sus colores que apenas despuntan. Es una sorpresa”.

Esta pintura al igual que las cerca de 3.000 que Monet produjo durante su trayectoria artística se caracteriza por el juego cromático, cuyo principal elemento es la luz.

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Impresión, sol naciente fue descubierta en la primera muestra colectiva del Grupo de Batignolles en 1874. Este cuadro generó reacciones en la prensa de la época. El crítico Philippe Burty agradeció a Monet “por captar impresiones tan fugaces”.

Mientras Louis Leroy, en el artículo de Le Charivari, La exposición de los impresionistas, mencionó “el papel pintado en estado embrionario está más acabado que esta marina”. El motivo de esta obra es el puerto de Le Havre en Francia, usando muy pocos toques de pincel que sugieren en vez de delinear.

Monet explicó posteriormente el título: “El paisaje no es otra cosa que una impresión, una impresión instantánea, de ahí el título, una impresión que me dio. He reproducido una impresión en Le Havre, desde mi ventana, sol en la niebla y unas pocas siluetas de botes destacándose en el fondo... me preguntaron por un título para el catálogo, no podía realmente ser una vista de Le Havre y dije:  pongan impresión”.

Monet (1840-1926) fue atrevido, apasionado, trabajador incansable, amante de la buena vida, amigo de sus amigos y aglutinador de talentos. Atravesó los problemas económicos de los jóvenes pintores de su época y luego su consagración como artista y los más altos honores cívicos de su país. Le Havre, París, Argenteuil, Vétheuil y Giverny fueron los espacios en los que desarrolló su vida y los objetos de su obra.