Para los niños de los pueblos rurales de Jamaica, correr forma parte del crecimiento como lo es jugar al beisbol en Estados Unidos o al fútbol en Europa, África o América Latina. Los chicos y chicas participan en carreras nacionales ya a la edad de 5 años, y para cuando llegan a ser adolescentes, los mejores corredores compiten frente a una multitud de 30.000 personas cada año en el Estadio Nacional. Los corredores son fuente de orgullo en este país isleño, que lucha contra el delito y la pobreza pese a su fama de paraíso indulgente para los turistas. Con 2,8 millones de habitantes, Jamaica ha producido las cuatro mujeres más veloces en 200 metros de 2008, cuatro de los corredores de 100 metros más veloces y el hombre más veloz para ambas categorías, Usain Bolt.

Se espera que en los Juegos Olímpicos de Pekínb, los jamaiquinos ganen medallas en los 100 metros planos y carreras de relevos.

Si bien los engaños con drogas y las suspensiones han echado un velo sobre las carreras en pista y en campo, según los grupos de seguimiento y antidoping, ningún corredor que entrene en Jamaica ha dado positivo por esteroides. Sí han dado positivo por estimulantes corredores entrenados en Estados Unidos.

Publicidad

Glen Mills, el entrenador de Bolt, dijo que los jamaiquinos están orgullosos de su trayectoria. “Es algo que cuidamos con mucho esmero, y es algo que el país reprocharía”, dijo. “Los atletas son conscientes de eso y tratan de no caminar sobre la cuerda floja”.

Se empieza a correr a una edad muy temprana. Las competencias escolares son un preludio a las carreras del campeonato anual con más de 2.000 atletas. “Si eso no te motiva, ¿qué podría motivarte?”, dijo Marvin Anderson, ganador de una medalla de plata en el campeonato mundial 4x100 de carreras de relevos. El éxito jamaiquino ciertamente no se debe a la calidad de las instalaciones de entrenamiento. Los integrantes del club de corredores profesionales dominante, MVP, se entrenan en la Universidad Tecnológica en una pista oval de césped con carriles definidos por una mezcla de alquitrán y diesel.

Se ejercitan con un viejo equipo de pesas en un pequeño gimnasio. “No conseguimos cosas fácilmente, y el trabajo duro rinde”, dijo Kerron Stewart, el tiempo más veloz para mujeres en 100 metros.
DUFF WILSON