El latín sigue siendo el idioma oficial de la Santa Sede, junto con el italiano, y tanto Juan Pablo II, como, muy especialmente, el actual Pontífice, Benedicto XVI, han intentado recuperarla para actividades y momentos destacados.
Benedicto XVI defiende, por ejemplo, que en las misas de carácter internacional, los rezos comunes se hagan en latín, para unir a los ciudadanos de diferentes lenguas. Ya es normal que el Padrenuestro se rece en latín al final de la audiencia pública de los miércoles.
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Con ese interés por recuperar esa "lengua muerta", desde este viernes cualquier persona que entre en la página web del Vaticano también puede "pinchar" en "Sancta Sedes. Latine", en idioma latín.
En latín se puede consultar la biografía de los papas (Summi Pontifice), la Biblia (Bibblia Sacra), el catecismo (Catechismus Catholicae Ecclesiae), el Código de Derecho Canónico (Codex Iuris Canonici), los textos del Concilio Vaticano II (Concilium Vaticanum II), así como los dicasterios de la Curia Romana (Romana Curia).
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La Oficina de Prensa sigue, sin embargo, sólo con los otros idiomas.