La dirección  del filme considera que es una buena propuesta y hay muchas expectativas sobre la aceptación que recibirá del público.

Luces, glamour y bellas modelos fueron el marco del rodaje de la primera escena de la película Retazos de vida, que dirige  la cineasta quiteña Viviana Cordero y cuya producción está a cargo de Films Factory.

El trabajo cinematográfico  lleva dos semanas de producción y reúne a talentos nacionales como Éricka Vélez, Geovana Andrade, Marina Salvarezza, Omar Naranjo, Azucena Mora, Aurora Valdez y María Teresa Guerrero. También participan los extranjeros Christian Bach (argentina) y William Levy (cubano-americano).

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Según Cordero, se trata de una historia de madre e hija y de conflictos generacionales. Tiene escenas fuertes y un par que enfocan lo sexual. “Ante todo es una tragicomedia porque tiene mucho de humor, porque la vida es así”, precisa.

Esta es la tercera cinta que Cordero dirige. Hace 17 años estuvo al frente de  Sensaciones  y hace seis de Un titán en el ring.

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La directora nacional asegura contar con un gran equipo técnico y explica que la primera escena, sobre un desfile de modas cuya locación fue el hotel Hilton Colón, se grabó recién el domingo pasado por la cantidad de extras que requirió.

Pero, añade, la cinta ya cuenta con algunas escenas grabadas. En estas participaron Marina Salvarezza y Geovana Andrade, a quienes entonces se vio rodeadas por un staff  que arreglaba sus cabellos y colocaba los micrófonos. Todo bajo la atenta mirada de Cordero.

La ‘niña María Gracia’ de la telenovela ‘El Cholito’, de Ecuavisa, encarna a Andrea, personaje que, según ha dicho, es diferente a los que hasta ahora caracterizó, pues lo dice todo con la mirada y no necesita palabras para expresar lo que siente.

Para integrarse a Retazos de vida, Andrade adelantó la grabación de los capítulos de El Cholito en los que aparecía.

De vuelta a la grabación de la primera escena del filme, su productora, Veicky Valdez, dice que por las variaciones del clima se debió implementar una pasarela en el Hilton Colón y no un escenario más grande, como tenían en mente. Este hubiera sido el Palacio de Cristal, “pero las lluvias no ayudan”.

Las protagonistas del desfile de modas son Guerrero y Vélez. Ellas dan vida a Lorena y Cristina, dos modelos que desde el inicio de la trama reflejarán su rivalidad. “Mi personaje llega a la ciudad desde Vinces y por complejos miente sobre su origen”, revela Guerrero.

La también presentadora de ‘En contacto’, espacio de Ecuavisa, añade que su personaje cambia su apellido a Morelli para hacer creer a los demás que llegó de Italia. Pero ¿cómo llega a convertirse en imagen de una importante empresa? “Gana un concurso de modelos que le concede ese rol. La dueña de la compañía es la madre de Cristina (Vélez), una joven caprichosa que quiere desplazarla”.

Durante la escena del desfile de modas, Denisse Klein (directora de la Academia Klasse), asesoró a Guerrero y Vélez sobre cómo debían desenvolverse en la pasarela.

En el rodaje de la película se escogerán locaciones en zonas de lujo (Samborondón) y barrios marginales de Guayaquil.