Comienzan burlándose de la Constituyente. “La corte celestial, perdón, la Asamblea”, dice el entrevistador. Mendoza añade: “Los diputados Hernández y Núñez no saben nada de medios de comunicación”. “No les diga diputados, se van a resentir”, agrega Baquerizo.
En la parte medular de la entrevista, se dice lo siguiente:
AM: ¿Para qué quieren las frecuencias? ¿Como un botín?
RB: Los botines son para repartirse. Pero ¿sí sabe qué pasa con el mal reparto?
AM: Sí, lo sé.
RB: A mí me han contado, no lo conozco, es una razón para que en ciertos sectores le hagan conocer al señor de arriba o de abajo, eso no sé.
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Y un digno final:
RB: ¿Cómo se llama ese futbolista del Milan?
AM: Kaká.
RB: Quítele la tilde y eso es aquella declaración de Bolivia (un manifiesto de los ministros de Cultura de la región reunidos en Bolivia hace varios meses).
¿Los ciudadanos se informan de esta manera? ¿Contribuye a un debate democrático con libre circulación de ideas?
La crisis de la democracia descrita por Gore no solo atañe a Estados Unidos. En países como el Ecuador hay un agravante: el sistema democrático nunca se ha consolidado. ¿De qué mercado de ideas podemos hablar? Pero ya estamos en la era electrónica. Volver atrás no es dable. ¿Qué papel le toca jugar a la TV en la construcción de un campo de juego para el debate democrático?