Aún más inútilmente en una telenovela que se retuerce cada día a escalas delirantes. Lo sucedido el jueves pasado ya colmó la medida: el pobre de Luciano (uno de los protagonistas), que antes había perdido la memoria, sufrido intentos de asesinato, había sido perseguido por la Policía por un asesinato de una mujer que en realidad estaba viva, etcétera, volvió a sufrir otro intento de asesinato justo cuando rescataba a su madre de un oscuro lugar donde la había encerrado Esteban, el perversísimo galán malo.