Rodrigo Lara Restrepo, hijo del asesinado ministro de Justicia Rodrigo Lara Bonilla, renunció al cargo de “zar” anticorrupción de la Presidencia de Colombia argumentando “razones personales”, luego de una nota de prensa que vincula al presidente Álvaro Uribe y al padre de este con el narcotráfico que cometió ese crimen en 1984.