Un total de 17 llamadas de auxilio y 40 personas atendidas fueron los resultados que arrojó el programa ‘El conductor policía amigo’, que concluyó ayer en el sector norte de Quito.
Los días 3, 4 y 5, por las fiestas de Quito, desde las 20:00 hasta las 06:00, la Unidad de Vigilancia del Norte brindó su apoyo “para que bajen los índices de accidentes de tránsito”.
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A lo largo de la zona se ubicaron doce bases de reacción móvil en las que cualquier persona que se hallaba en estado de embriaguez pedía a un policía que la condujera hasta el domicilio, se la entregaba a los familiares y recibían un pago módico similar al de una carrera de taxi para regresar a su base.
El comandante de la Unidad, Fausto Gavilanes, aseguró que el proyecto “fue todo un éxito...”, porque de hecho una de las personas que condujeron en estado de embriaguez pudo ocasionar un accidente. Según datos de la Policía, en todo el país se han registrado, en lo que va del año, más de 10 mil accidentes de tránsito, sin contar a la provincia del Guayas.
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Por este motivo se crearon las bases de reacción móvil en esta zona, que proporcionan a la ciudadanía lugares cercanos adonde pueda acudir en caso de emergencia. “La idea es dar una sensación de seguridad a la población”, expresó Gavilanes.