Como todos los años el ritual se repitió. En las casas de los cinco personajes de la Mama Negra durante la madrugada de ayer se realizó el rito de disfrazarse con la ayuda de expertos en maquillaje, familiares y amigos cercanos, en medio de una fuerte lluvia que cayó a esa hora.

En las viviendas de la Mama Negra, el Rey Moro, el Abanderado, el Capitán y el Ángel de la estrella,  todos se levantaron desde las tres de la mañana para estar listos a las seis en punto, hora en que las bandas de la Policía y del Municipio llegaron junto a los concejales de Latacunga para  recogerlos y al son de la música acompañarlos hasta la tribuna en donde se efectuó la ceremonia de transmisión de mando.

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Este acto es una costumbre en la que los personajes del año anterior entregan sus símbolos a los nuevos; cada uno dio un mensaje de unidad antes de cederlos. El momento más emotivo fue cuando Edmundo Rivera, Mama Negra 2006, entregó la muñeca que representa a la negrita Baltazara (que según la costumbre es la hija de la Mama Negra) a Xavier Peñaherrera, quien representó al mismo personaje este 2007.

En la Tribuna Cívica, que es el sitio en el que siempre se realiza este acto, estuvieron las principales autoridades, entre ellas el vicepresidente de la República, Lenin Moreno, que habló de su cercanía con Latacunga por ser la tierra de los familiares de su esposa.

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Una vez finalizado el cambio de mando, cerca de las 10:00 se efectuó el tradicional baile de la Mama Negra con el Capitán y el alcalde de la ciudad, Rafael Maya, quien se mostró feliz por la acogida de la comparsa y el apoyo de otros municipios.

Luego, cerca de 250 comparsas junto a los personajes se trasladaron hasta el sector de Locoa, desde donde salieron los disfrazados para deleitar a los presentes.

Colorido y alegría
En medio de aplausos y vivas, la tradicional comparsa de la Mama Negra recorrió con sus personajes las calles de la ciudad, en donde se apostaron más de sesenta mil visitantes.

Xavier Peñaherrera, designado Mama Negra 2007, cabalgando su caballo hacía bailar alegremente a su hija Baltazara y con un chisguete arrojó leche a los espectadores.

A diferencia de años anteriores, el municipio prohibió la venta de cerveza y la colocación de tarimas a lo largo del recorrido, sin embargo, esta disposición se cumplió a medias, dado que en algunos sitios sí se ubicaron carpas de expendio de bebidas y comidas que dificultaron el paso de la comparsa.

APUNTES: Comparsas

Refuerzos
La Policía Nacional contó con refuerzos que vinieron de las provincias de Bolívar, Cañar y Pichincha, quienes realizaron un dispositivo de seguridad y transito que no permitió la entrada de vehículos al centro de la ciudad y se ubicaron parqueaderos en las afueras.

Licor
Como es tradicional durante el recorrido de la Mama Negra se repartió licor entre los asistentes, como símbolo de hospitalidad, aunque algunos abusaron y desde el inicio de la comparsa ya se advertía de personas en estado de ebriedad.