En una residencia a la entrada de Manta vive la familia ecuatoriana de Adrienne Eliza Bailón Alicea (24 años), estrella de Disney que reemplazará a Vanessa Hudgens en la tercera parte de la película High School Musical.
En estos días en esa casa las tías, primas y primos de la joven actriz no hablan de otro tema y vibran de emoción al decir que ella será parte del elenco de High School Musical, una producción de Disney cuyas dos primeras partes han tenido arrollador éxito a nivel mundial entre los niños y jóvenes.
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Melissa, Claudia y Alejandra Hanze, primas en segundo grado de la estrella, dicen que son “fanáticas a morir” de High School Musical. Que adoran a Vanessa Hudgens, despedida la semana pasada porque circula en internet una foto donde está desnuda. Que les da pena que no estará en la nueva película, ni en las presentaciones en vivo que hace el elenco en EE.UU. y fuera de él; pero que mayor es su alegría porque Adrienne Bailón la reemplazará.
A ella la quieren mucho “porque es una persona sencilla, extravertida y cariñosa” con la que han compartido hermosos momentos en las playas de Manta cuando ha llegado de los Estados Unidos, donde está radicada, a visitarlas. Tanto ellas como su tías, guardan con celo y muestran con orgullo las fotos, discos, revistas que contienen las canciones, películas o entrevistas de la artista.
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Ella trabaja desde el 2003 para Disney en el grupo The Cheetah Girls (Las chicas guepardo), famoso entre los adolescentes de los Estados Unidos. Su voz suena en diez CD, y tiene pendiente de grabar en la India The Cheetah Girls 3.
Su pariente Adrienne nació en Manhattan, Nueva York (EE.UU), donde su padre Freddy Bailón (66) llegó hace 35 años con la ilusión de ubicarse como cantante. Viajó con su coterráneo David Balda con quien integraba la orquesta manabita La Clave de Oro, para presentarse por dos ocasiones en un night club. Un año después regresó a ese país para volver a probar suerte, en esa búsqueda conoció a la neoyorquina Nilda Alicea (de padres puertorriqueños), se casaron y tuvieron a Claudette y Adrienne, quienes también heredaron el amor por el canto, dice con emoción Gladys Bailón, hermana del papá de la estrella. “La vena artística viene de los Cevallos. Es una familia de políticos y cantantes”, dice la tía de Adrienne, que también lo es del presidente del Congreso ecuatoriano, Jorge Cevallos.
La vida de Adrienne es cada vez más ocupada, dice su padre, quien está feliz porque ella ha logrado lo que él no pudo: ser una estrella famosa.
“Le cuento que mi hija Claudette, de 28 años, canta y baila mejor que Adrianne, pero se le dio el éxito a Adrienne”, dice su papá. Adrienne vive en Los Ángeles y está de novia con su contador. De niña quería ser abogada, pero solo terminó el bachillerato. Le gusta ahorrar para cuando se le acabe la fama.