Ana María Kleare, coordinadora de este tipo de distracciones que ofrece La Marcelle, ubicada en la ciudadela Urdesa, indica que la ‘hora loca’, generalmente se realiza desde las doce y treinta de la noche hasta la una y treinta de la mañana, y empieza con cierta expectativa: “se baja la luz y suena por unos segundos una sirena y entonces entra una banda y tira papeles al centro de la pista”, cuenta Kleare.