Dos de los nietos de Wayne, Anita LaCava Swift y Nick Kuhle, asistieron a la ceremonia en la que se develó la obra de 2,64 metros de Wayne con botas, espuelas y sombrero de vaquero, sosteniendo un rifle en su mano izquierda.

"Siempre es increíble para nuestra familia el poder estar entre sus seguidores, porque ha estado muerto por casi 30 años pero hay niños de 3 que se me acercan y me dicen lo mucho que les gusta", dijo Swift el sábado.

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"Es simplemente increíble. Fue maravilloso tener un icono como él por abuelo", indicó Kuhle.

Wayne fue un líder del museo y fungió como miembro de su consejo administrativo desde su inauguración en 1965 hasta su muerte en 1979.

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"Creyó en lo que podría ser este sitio y se dedicó a él... Estuvo aquí para poner la primera piedra, en muchos de nuestros primeros eventos, sacando a flote este lugar porque creyó en el mensaje que íbamos a dar", dijo Chuck Schroeder, director ejecutivo del museo.

El escultor Edward J. Fraughton indicó que modeló la estatua a semejanza del Wayne de mediados de su carrera para mostrarlo de un modo verdaderamente épico en lugar de como un individuo en una película particular.