Después de seis semanas en rehabilitación por adicción a las drogas, la actriz de 21 años que fue detenida en mayo supuestamente por manejar bajo los efectos de sustancias, completó el tratamiento el viernes, indicó su representante en un comunicado a la revista People.
No obstante, Lohan volvió a la vida nocturna el sábado cuando fue retratada por paparazzi en la discoteca Pure, de Las Vegas (Nevada, oeste), donde solo disfrutó de una bebida 'energética' sin alcohol, reportó la misma revista.
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Su portavoz, Leslie Sloane, afirmó que Lohan aceptó salir del centro de rehabilitación portando un brazalete electrónico destinado a vigilar sus contactos con el alcohol.
Esta fue la segunda vez en seis meses que Lindsay Lohan se sometió a una desintoxicación: en enero se internó en una clínica cerca de Los Ángeles después de haber confesado que estaba asistiendo a reuniones de alcohólicos anónimos.
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Lohan se vio envuelta en todos estos problemas cuando aún no tenía la edad para consumir alcohol según la ley de Estados Unidos: los 21 años que acaba de cumplir.
Pese a su desintoxicación, la joven actriz tiene una cuenta pendiente con la justicia luego de que a finales de mayo se salió dela ruta en Hollywood cuando manejaba su automóvil Mercedes.
En ese episodio la Policía encontró droga en su automóvil. No fue arrestada pero deberá comparecer ante un juez para una audiencia preliminar el 24 de agosto.