Soy una adolescente de 16 años y conocí hace diez meses a un primo de segundo grado; es dos años mayor que yo y desde el primer instante que nos conocimos sentimos una atracción física. Empezamos a comunicarnos y nos hicimos enamorados; él es mi primer novio. Nuestra familia y mis padres principalmente se han enterado y creen que todo esto es algo que no vale la pena y se oponen rotundamente a la relación. Hace poco tuve problemas en mi casa y me alejé diez días de él, sin saber nada el uno del otro. Pero me hace muchísima falta. Necesito que me aconseje.
N.N.
Guayaquil

Publicidad

Comprendo que se sienta tan angustiada, según me comenta, esta es su primera relación de noviazgo y no ha recibido la aceptación familiar. La actitud de sus padres obedece en cierta forma a los temores de la familiaridad existentes entre ustedes, así como a vuestra juventud e inexperiencia emocional que le hacen prever un posible fracaso de la relación. Los sentimientos de enamoramientos son muy intensos y apasionados a su edad, por lo que  sería conveniente que comprendiera otros aspectos de este proceso.

Consideremos que el enamoramiento es un grado más intenso de amor, es ciego y  confunde a los amantes. El enamoramiento en sus inicios produce un intenso “apego”, que no es amor, aparenta completud, promueve la idealización del otro y anula  la distancia crítica (capacidad para razonar y discriminar adecuadamente). Crea una ilusión que se nutre del deseo por el otro, generando una especie de “engaño recíproco”, dentro del cual no es posible el conocimiento real de la persona amada. Se suele decir por ello  que es mejor que el enamoramiento pase rápido  para ver si el amor se sostiene y tiene posibilidades.

Publicidad

Para que un sentimiento como el amor prospere, la pareja debe ser “lo suficientemente tolerante a las frustraciones”, debe “tener capacidad para soportar el dolor” o la falta de placer y debe “mantener la ilusión de permanencia” en el tiempo. Para ello es necesario desarrollar madurez emocional, la cual sirve de guía para elegir a la persona adecuada para usted.

Elegir a su primo como pareja  es un ejemplo de la ley del mínimo esfuerzo, que nos impulsa a escoger entre lo más accesible a nosotros sin seleccionar demasiado, no olvide que su pareja es también muy joven y esta es una experiencia casi tan nueva para él como para usted.

Le aconsejaría que espere un poco más, antes de entablar una relación con cualquier persona y aunque no sea muy placentero, creo que debe esperar un mejor momento antes de volver a enamorarse de alguien más. Dedíquese a cultivar su intelecto y aprender cosas nuevas, cuenta con su juventud y aunque por ahora no lo pueda creer, toda esta tristeza y desilusión pasará y sabrá elegir el camino más conveniente para su vida.
Dra. Glenda Pinto Guevara,
Psicóloga Clínica. Terapeuta Familiar y de Pareja.
Telfs.: (04) 232-4066, (04) 252-2382/09-961-2322

No me dejan salir
Soy un chico de 17 años y mi problema es que mis padres no me dejan salir de la casa. La verdad esto me da mucho coraje porque mis amigos me invitan a fiestas o a jugar pelota y yo nunca voy. Esto causa mucha burla porque dicen que soy un niño de mami, además me gusta una chica pero no puedo invitarla a ningún lado. En la casa hago méritos para los permisos, por ejemplo: lavar los platos, portarme bien y demás cosas, pero no funciona, siempre es lo mismo cuando pido permiso. Mis padres siempre me preguntan para dónde voy, con quién voy, para qué voy, a qué hora llego,  cuál es la dirección, cuál es el teléfono y otras cosas, pero al final no me dejan salir. Yo no soy de malas amistades, soy un chico tranquilo tratando de divertirme con mis amigos y tener novia. Estoy pensando cuando cumpla mis 18, tener un trabajo e irme de la casa, y si es posible a otro país porque ya no puedo soportar más estar encerrado. ¿Qué debo hacer?
N.N.,
Guayaquil

Primero debe serenarse y tratar de dialogar con sus padres, porque ellos le aman y tienen las mejores intenciones, pero muchas veces poseen dificultades para liberarse de los antiguos patrones de disciplina y comunicación y desean que sus hijos resulten como ellos quieren o como creen que es mejor; se aferran a los hijos, no les dan oportunidad de independizarse y no les aceptan sus formas de vida.

Debemos comprender que detrás de la mayoría de las reacciones paternas frente a los hijos adolescentes hay un nivel de ansiedad muy alto. Se sienten angustiados porque comprenden que el hijo crece más allá de su tutela y piensan que nadie podrá orientarlo mejor que él. A veces no es así. Sugiero psicoterapia familiar para que logre mejorar su propio comportamiento y sus padres alcancen a aplicar una educación efectiva  y más enriquecedora.
Dra. Ángela Oleas Hernández
Psicóloga y orientadora familiar.
Telfs.: (04) 212-1667/ 09-807-5920

Padres desesperados
Tengo una hija de 24 años. Está casada y hace un tiempo empezó a tener un cambio en su carácter. Era muy irritable, golpeaba a su hijita de 3 años, incluso empezó a tomar dinero que encontraba en la casa, aunque no fuera de ella. Hace un mes descubrí que su esposo la golpeaba, ella nunca quiso reconocerlo por vergüenza. Hace quince días tuvo el valor de contárselo a mi esposo. Hablamos con nuestro yerno y nos prometió que las cosas cambiarían. Esta situación nos ha traído mucha angustia. Sufrimos mucho por nuestra hija, no queremos que su matrimonio termine. Soy una madre que no tuve la oportunidad de prepararme y estudiar, pero siempre he trabajado de sol a sol por sacar adelante a mis hijos. Estoy realmente desesperada, quiero ayudar a mi hija.
N.N.,
Arenillas, El Oro.

Antes que nada, frente a la angustia y la desesperación que describe sentir, el buscar ayuda es un gran paso ya. Lamentablemente no explica cuál es la posición de su hija frente al problema que usted plantea. ¿Cómo justifica ella su cambio de carácter o siquiera lo reconoce? ¿Es ella quien lo asocia a los problemas maritales? O tal vez, ¿ha podido ubicar otros factores que estarían influyendo en su estado emocional? Posiblemente el maltrato es solo uno de estos factores, acorde a esto la posibilidad de que la solución sea terminar el matrimonio (lo que dice usted temer) no sería necesariamente la única alternativa.

Se describe a usted misma como una madre que se encuentra desesperada, angustiada y que desea, una vez más, ayudar a su hija. Sin embargo, es primordial que sea ella misma la que quiera buscar una ayuda, tal vez una orientación profesional que la ayude a analizar un poco más su relación matrimonial y lograr ubicar otros aspectos, no tan evidentes, que pueden estar influyendo en ella.
Lcda. María del Carmen Amador
Psicóloga Clínica.
Telfs.: (04) 288-6544/09-602-3034.

Zumbido en el oído
Mi mamá es una persona activa, hace dos años tiene un zumbido en el oído, se hizo revisar por un neurólogo en la ciudad de Cuenca, el cual le dijo que tenía que convivir con el zumbido para toda la vida. Mi familia tiene antecedentes del mal de Parkinson, ¿será esto?
N.N.,
Guayaquil

El zumbido o tinitus en el oído se origina del sistema auditivo (sensorioneural) y el que se deriva de estructuras somáticas alrededor del oído, incluyendo estructuras vasculares, articulación temporo-mandibular, y musculatura faríngea. El estudio del zumbido sensorioneural requiere una exploración del otorrinolaringólogo para identificar alguna enfermedad auditiva que cause o exacerbe el zumbido. La pérdida auditiva acompaña frecuentemente al zumbido. El zumbido se puede encontrar en la enfermedad de Meniere. Pero el zumbido asociado con sordera unilateral es indicación de realizar una imagen cerebral para descartar lesión del ángulo pontocerebeloso.

De las otras estructuras que pueden estar comprometidas las  más frecuentes son las vasculares. Las fuentes arteriales de zumbidos pulsátiles incluyen soplos carotídeos, disección carotídea, malformaciones arterio-venosas, fístulas carótido cavernosas. En resumen primero debería ir al otorrinolaringólogo y luego al neurólogo. Por otro lado no creo que tenga que ver el zumbido con el antecedente familiar de la enfermedad de Parkinson.
Dr. Javier Sánchez Espinoza,
Neurólogo.
Telfs.: (04) 258-0025/09-954-5888