Traspaso. Clientas que estaban inscritas en el norte pidieron su pase hacia este sector de la ciudad.

Clientas del gimnasio Curves que se ejercitaban en las ciudadelas Urdesa, Kennedy Norte, La Garzota o Los Ceibos pidieron su traspaso al nuevo local que esta franquicia estadounidense   abrió el mes pasado  en el Barrio del Centenario (José V. Trujillo y Dolores Sucre).

Este ya es el cuarto centro de ejercicios que Curves inaugura en Guayaquil, además del establecimiento que mantiene en  la vía a Samborondón.

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En el Centenario, en su primera semana de apertura, el gimnasio exclusivo para mujeres ya había afiliado a 100 nuevas socias, según la administradora del lugar, Berta Romero.

Esta franquicia se basa en poner a disposición de las mujeres interesadas en mejorar su figura un programa especial de rutinas físicas y en máquina durante treinta minutos tres veces a la semana. La clienta llega, registra su hora de ingreso en una computadora y, si falta, la secretaria del local le hará una llamada para reprogramar la cita.

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Antes de la primera sesión, la clienta debe someterse a un análisis que consiste en tomar sus medidas, calcular –a través de un aparato especial– su nivel de grasa corporal y finalmente establecer su meta personal: tonificar los músculos, perder una determinada cantidad de peso o mantenerse saludable.

La persona realiza durante treinta  minutos ejercicios en un circuito de máquina. Cada rutina por módulo dura treinta  segundos. Luego se pasa a otro circuito de la máquina de resistencia, que es la novedad del gimnasio, pues sus propietarios aseguran que es única en el país. El módulo cuenta con  funciones para hacer trabajos de resistencia localizados para piernas, brazos, espalda, muslos, bíceps, abdomen y otras partes del cuerpo.