El vicepresidente colombiano Francisco Santos propuso ayer someter a una “castración química” a los violadores de niños, en medio del debate generado por una ley sobre el endurecimiento de las penas a este tipo de crímenes que empezó a ser estudiada ayer por el Congreso.
Santos dijo que en Colombia “las penas por violación son muy bajitas” y que se debe estudiar la posibilidad de aplicar la “castración química”, por la cual se obliga a los responsables de estos delitos a ingerir drogas para inhibir su deseo sexual.
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Las declaraciones de Santos se dieron mientras la Cámara de Representantes de Colombia inicia el estudio de un proyecto de ley para imponer la cadena perpetua a los violadores de niños.
La legislación colombiana contempla penas de cinco a doce años por la violación, pero los agresores pueden recibir rebajas de hasta 75% de la condena por buena conducta y confesión.
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El debate sobre las penas a los violadores se abrió después de que en junio medios de prensa advirtieron que el mayor asesino en serie en Colombia, Luis Alfredo Garavito, que confesó haber torturado, violado y asesinado a 140 niños entre 1992 y 1998, podría quedar en libertad en cuatro años por rebajas de penas.
Pena de muerte
En Perú, en una medida similar y debido al auge de asesinatos y violaciones contra menores de edad, el presidente Alan García ha enviado al Congreso un proyecto de ley para restablecer la pena de muerte a quienes violen y asesinen a niños.
El caso de una niña violada de ocho años, embarazada de seis meses, reavivó ayer los pedidos de aplicación de sanciones más severas para los culpables de pedofilia.