Con el título de Sin querer queriendo, frase de uno de sus más célebres personajes de televisión, el cómico mexicano Roberto Gómez Bolaños, Chespirito, lanzará un libro autobiográfico la próxima semana.
Sin querer queriendo era la frase utilizada por ‘El Chavo del 8’, un niño pobre de una típica vecindad mexicana, para justificar sus travesuras, que divirtieron a varias generaciones de latinoamericanos y aún siguen transmitiéndose en algunos países.
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El libro “es el testimonio conmovedor y divertido de un hombre que ha escalado tenaz y exitosamente los peldaños del mundo del espectáculo”, dijo la editorial en un comunicado.
Chespirito, de 77 años, y cuyos personajes impulsaron al gigante de medios Televisa Tlevisacpo.MX , habla en su biografía de su pasión por el fútbol y el boxeo, de su trabajo como creativo de una agencia de publicidad, pero sobre todo de cómo surgieron los entrañables ‘El Chavo’ y el ‘Chapulín Colorado’.
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‘El Chapulín’, que al igual que ‘El Chavo’ se puso al aire hace 36 años, es una especie de héroe ingenuo y miedoso, que tiene antenitas de vinilo para “detectar la presencia del enemigo”.
‘El Chavo’, que fue doblado al portugués para emitirse en Brasil, surgió de casualidad cuando el también guionista Gómez Bolaños tuvo que salir del paso creando un nuevo personaje para sustituir a otro interpretado por el actor Rubén Aguirre, que decidió irse a otro programa, pero que regresaría después a trabajar con Gómez Bolaños interpretando el personaje de ‘el profesor Jirafales’.
“Jamás pretendí que el público pensara que yo era un niño. Lo único que buscaba era que aceptara que yo era un adulto que estaba interpretando el papel de un niño”, expresó Chespirito en Sin querer queriendo.
El cómico también narra cómo el personaje de ‘El Chapulín Colorado’ iba a llamarse ‘El Chapulín Justiciero’ y su interpretación fue rechazada por muchos comediantes hasta que, en la actuación de su autor, su éxito fue inesperado. “Jamás había imaginado el inmediato éxito que obtendría mi personaje, pues a lo mucho habrían transcurrido dos semanas de su debut cuando la gente ya repetía: “¡No contaban con mi astucia”, aseguró.