El escritor colombiano Gabriel García Márquez está contento por el fracaso de la consulta popular que buscaba cambiar el nombre de su natal pueblo de Aracataca por el de Macondo, la aldea imaginaria de su obra Cien años de soledad, informó el pasado domingo la prensa local.
Según el diario bogotano El Tiempo, el premio Nobel, quien no intervino en el proceso, “consideraba el cambio como un verdadero desatino y un pésimo precedente”. “Respiró tranquilo cuando se enteró de que su pueblo natal seguirá teniendo el viejo nombre de origen guajiro y no el de Macondo, importado de África para bautizar una finca y popularizado luego a través de sus libros”, agregó el periódico.
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La consulta para cambiar el nombre del poblado caribeño por Aracataca-Macondo fracasó el 25 de junio al no alcanzar el número mínimo de votantes que exige la ley.