La obra teatral  Y aquí no ha pasado es nada comenzó su segunda temporada desde el pasado jueves  hasta el próximo 28 de mayo, en la sala Mariana de Jesús de la Casa de la Cultura Ecuatoriana de Quito (Seis de Diciembre y Patria). Las funciones van de jueves a domingo, a las 20h00.

Este es un proyecto del grupo de teatro Mandrágora, que tuvo un proceso de investigación y exploración de más de un año para su realización. Está protagonizado por las actrices Susana Nicolalde y Sandra Ortiz, quienes recrean la memoria de la calle por medio de diversas historias que cuenta una cachinera a un niño en una travesía cotidiana.

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 La vida de la calle cobra una visión humana, lejana a la de los prejuicios o  las representaciones de los medios de comunicación. Fue construida a través del guión de Susana Nicolalde, quien asume a su personaje como una mujer de la Costa ecuatoriana, que vive entre la felicidad, los sueños y la soledad.

La actriz dice que recrea partes de su vida y de sus experiencias. La ambateña Sandra Ortiz se adentra en el personaje de un niño de la Sierra, que se ve fascinado ante la magia de las historias, que las revive por medio de la narración  oral.

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 La obra  ha sido presentada en Ibarra, Ambato y Otavalo. No solamente en teatros sino también en la calle y en foros estudiantiles. Se prevé que próximamente esta pieza teatral  llegará a Guayaquil.

Y aquí no ha pasado es nada cuenta con la música de Juan Carlos Velasco, una puesta en escena de Patricio Estrella y la dramaturgia es de Patricio Vallejo.