Con la consigna “Todo indocumentado también es ser humano”, unos cien manifestantes realizaron una protesta simbólica frente a la Embajada norteamericana contra las reformas migratorias que se debaten en EE.UU.
Unos con pancartas, otros encadenados, ejecutaron la medida en medio de un fuerte resguardo policial de la instalación diplomática.
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También en Cuenca familiares de emigrantes de comunidades y de barrios urbanos de la ciudad marcharon en apoyo a las manifestaciones en Estados Unidos.
“Son nuestros hijos, esposos, hermanos y no podemos olvidarnos que ellos se fueron para mejorar la situación de todos y lo están logrando; hasta los gobiernos necesitan de sus remesas”, expresó María Suconota, madre de un emigrante indocumentado.
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“Casi todos tenemos un familiar cercano en EE.UU., por eso debemos apoyarlos”, dijo Teodoro Naula.
ESCENARIOS
SORPRESIVAS REDADAS
Las batidas ayer se dieron hasta en la playa. El club Nicki Beach, en Ocean Drive, Florida, junto al mar, enfrentó una redada sorpresa, pero los meseros se despojaron de sus prendas (mandiles o uniformes) y se lanzaron al mar para confundirse entre los turistas.
APOYO DE CONGRESISTAS
Decenas de legisladores estadounidenses se sumaron a los inmigrantes y a sus defensores en el boicot laboral nacional de ayer al suspender los trabajos en el congreso estatal de Nueva York. La huelga legislativa se dio en apoyo al denominado Un día sin inmigrantes.
NO RESPALDARON
Luis Quintana, un dirigente de inmigrantes mexicanos, indicó que los dueños de la mayoría de locales en la concurrida avenida Bergenline, de Nueva Jersey, no cerraron porque sus dueños son cubanos y casi todos “están contra los inmigrantes de los demás países”.