La presencia en los alimentos de ciertas sustancias químicas que hasta ahora se consideraban inofensivas podría provocar el cáncer, según un estudio publicado en la revista Journal of Nutritional and Enviromental Medicine.
La Universidad de Liverpool, autora de la investigación, advierte a los padres que los sujetos de mayor riesgo son los niños. El estudio de la organización benéfica Cancer Research UK recomienda, sin embargo, tomar con prudencia, incluso a niveles bajos, ciertas sustancias químicas procedentes de los pesticidas y de plásticos podrían afectar al desarrollo del feto y aumentar la probabilidad de que la nueva criatura desarrolle un día cáncer.
Publicidad
Los expertos explican además que las organoclorinas, sustancias químicas contenidas en los pesticidas y en algunos plásticos y que se acumulan en la leche materna, pueden incrementar el riesgo en los bebés. Los expertos apuntan a la existencia de un vínculo entre los bajos niveles de substancias contaminantes y el cáncer y recomiendan a los padres que recurran a dietas orgánicas.