Todo es un tema, depende del límite y el enfoque

“La influencia del pasillo en la vida de los ecuatorianos”, “La influencia y consecuencia de la migración” suenan más a los temas que se plantean los chicos de colegio cuando recién comienzan a entregar sus primeras redacciones. Sin desmerecer en nada esos intentos; cuando se gana experiencia se aprende que delimitar los temas, llevarlos a su pequeña y justa dimensión es el primer requisito para poder profundizar en un texto.

Sin embargo, Ecuavisa anuncia que incursionará en el género documental y lo hará con esos temas. Aunque cabe la posibilidad de que sean temas que se lanzaron por la urgencia del promocional de Año Nuevo y que en el proceso sean mejor delimitados; ojalá las habilidades de los realizadores saquen adelante asuntos tan difusos con buenos enfoques. Porque, mucho depende de unos buenos límites, pero también de la forma de tratar las temáticas.

“La prostitución: un problema social” suena también a uno de esos macrotemas que muchas veces desembocan en ejercicios estériles que navegan a medias entre la sociología y el lugar común. Sin embargo, eso mismo, “La prostitución: un problema social” fue el tema con el cual se estrenó el nuevo programa de las noches de Teleamazonas, ‘Cuéntame tu vida’, producción peruana de la cadena Frecuencia Latina, y los resultados fueron bastante aceptables.

El debate y la complejidad
‘Cuéntame tu vida’ está conducido por la actriz Mónica Sánchez y tiene dos partes muy bien definidas. En la primera se presenta un “docu-soap”, es decir lo que acá en programas como ‘De la Vida Real’, ‘Archivos del Destino’ o ‘Pasado y Confeso’ se llamaban “dramatizados” de casos reales. Sin embargo, el serial peruano tiene una característica muy interesante: deja las historias inconclusas a propósito.

En los resquicios del final a medias se abre el espacio para la segunda parte del programa: el debate. En este espacio expertos e invitados con distintos niveles de relación con el tema tratado aportan interpretaciones que tienen la virtud de traspasar lo evidente, decir las cosas sin tapujos y complejizar sin complicar la discusión. En otras palabras: van a lo de fondo sin caer en lo inentendible.

Finalmente, tampoco hay conclusiones explícitas. Con lo cual se abre la oportunidad para que en cada hogar se produzca una nueva discusión.

Justamente discusión y complejidad (se debe reiterar que no significa complicación) es lo que faltó en gran parte de las series de producción nacional antes nombradas. ‘De la Vida Real’ es la que más se acercó al incorporar testimonios. ‘Pasado y confeso’ hizo lo suyo consultando en varias ocasiones a expertos. ‘Archivos del Destino’ es el juicio de valor del presentador. En ‘Cuéntame tu vida’, por lo contrario, no hay juzgamientos moralistas a priori, el papel de la conductora es neutro y el debate es la diferencia definitiva.