Varios países en desarrollo, entre ellos Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Ecuador y Perú, apoyados por Estados Unidos, reclaman que los subsidios a la pesca sean incluidos en las negociaciones de la Ronda de Doha de la Organización Mundial de Comercio (OMC).
  
A iniciativa de Brasil, que presentó en noviembre pasado una petición en este sentido a la OMC, la propuesta llegó incluso a ocupar este miércoles uno de los paneles de discusión durante la conferencia ministerial de la OMC, en el que participaron entre otros el representante estadounidense de Comercio Rob  Portman y la comisaria de Agricultura europea Mariann Fischer Boel por  convocatoria del WWF.
  
Todos coincidieron en que la super explotación está acabando con los caladeros, y en ella tienen mucho que ver los cerca de 15.000 millones de dólares en subsidios que recibe el sector, que supone casi el 20% de los ingresos globales de esa industria.
 
"Los subsidios son parte del problema y la OMC debe ser por tanto parte de la solución", aseguran los firmantes de esta iniciativa que incluye a Brasil, Chile, Colombia, Ecuador, Islandia, Nueva Zelanda, Pakistán, Perú y Estados Unidos.
  
"Nuestro propósito es destruir en la OMC los subsidios" al sector, dijo Portman, para "garantizar la sostenibilidad de los recursos marinos", 75% de los cuales están en peligro.
  
Por su parte, la comisaria Fischer Boel aseguró que la UE, objeto de las críticas por sus subvenciones al sector, "está completamente comprometida para trabajar en el diseño de disciplinas simples".
  
El ministro de Comercio de Senegal, Mamadou Diop, aseguró que para su país,  donde el sector pesquero representa el primer sector de exportación, con 270  millones de dólares al año y el empleo de 50.000 personas, las subvenciones  suponen una "competencia desleal" así como los acuerdos de pesca con Europa.
  
"Son cada vez menos sostenibles, menos justificables", aseguró el  ministro.