Las fuerzas iraquíes podrían empezar a relevar a las del Reino Unido en las tareas de seguridad en el sur del país el año próximo, anunció ayer el ministro de Defensa británico, John Reid.

El funcionario reconoció la existencia de corrupción y otros problemas en el entrenamiento de soldados y policías iraquíes, pero sostuvo que el proceso en general marchaba bien.

El cronograma para el posible comienzo del retiro no significó un cambio respecto de declaraciones anteriores. Sin embargo, sostuvo que la transferencia sería un proceso prolongado, no un paso singular.

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Este es un proceso que bien podría comenzar, la transferencia, en zonas de Iraq el año próximo, dijo.