La Unión Europea buscará el miércoles un acuerdo sobre la tarifa para la importación del banano latinoamericano al mercado comunitario, en un marco de divisiones entre quienes apoyan la nueva oferta de 179 euros por tonelada de la Comisión Europea y aquellos que la rechazan.
La cuestión será analizada por los embajadores permanentes de los 25 ante la UE, quienes se reunirán al mismo tiempo que sus ministros de Agricultura debaten otra controvertida reforma, la del régimen azucarero del bloque, según señalaron el martes a la AFP fuentes europeas.
La Comisión Europea presentó el jueves pasado una propuesta de arancel de 179 euros (unos 210 dólares) por tonelada para la importación a su mercado de banano procedente de países latinoamericanos, ocho euros menos que la anterior oferta de 187 euros rechazada por la OMC.
Mientras que España, Francia, Chipre, Italia, Irlanda y Finlandia apoyaron en principio la propuesta de la Comisión, otro grupo de países la rechazó por considerarla demasiado elevada: Holanda, Alemania, Malta, Polonia, Lituania, Eslovaquia, Dinamarca y República Checa.
De su lado, los países latinoamericanos productores de banano volvieron a decir "no" a la oferta, a la que calificaron de "total irrespeto" por el sistema multilateral de comercio.
Esta es la tercer propuesta que realiza la UE para intentar establecer a partir del 1 de enero de 2006 un régimen tarifario que satisfaga a los diferentes actores involucrados: por un lado los países exportadores de América Latina, pero también las naciones ACP (Africa, Caribe, Pacífico) y los propios productores europeos.
La primera tarifa propuesta (230 euros por tonelada) y la segunda de 187 euros que había planteado la UE fueron rechazadas por los árbitros de la Organización Mundial del Comercio a partir de una demanda presentada por Brasil, Costa Rica, Colombia, Ecuador, Honduras, Guatemala, Nicaragua, Panamá y Venezuela.