Las esporádicas lluvias presentadas en la cuenca alta del río Paute el fin de semana y la pertinaz lluvia que durante dos horas se presentó el lunes en Cuenca mejoraron los niveles de la cota en la represa Daniel Palacios de Amaluza, de la central hidroeléctrica Paute que genera en época de lluvias el 60% del consumo nacional de energía.
Ayer, la cota subió a 1.984,50 metros sobre el nivel del mar, a diferencia del lunes anterior, cuando alcanzó los 1.981 metros. Mientras que el caudal creció a 35 metros cúbicos por segundo, tras haber llegado al nivel más bajo el domingo anterior, con 21,5.
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El incremento de estos niveles permitió generar 3.323 megavatios por hora cuando el mínimo registro presentado en esta época de estiaje fue de 1.706 megavatios, también el domingo anterior, pero el incremento de producción de energía eléctrica continúa en el 10%, según Marcelo Cabrera López, gerente de Producción de Hidropaute.
Este porcentaje de producción continuará por disposición del Centro de Control de Energía (Cenace), por precaución, hasta que se supere la temporada de falta de lluvias, dijo el funcionario.
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Una de las consecuencias del estiaje presentado desde fines de julio en el Austro y que más afecta al país, es la reducción en la producción de energía de la central de Paute y que hasta el momento presenta los niveles más bajos en la historia del país.
Con la simple observación del embalse en la represa no logra divisarse la magnitud de la sequía, porque el verdor de la vegetación en toda la zona se mantiene, sin embargo los números colocados en una columna de hormigón que sostiene la infraestructura mostraron la semana pasada los niveles de la cota.
El 91, que hace referencia a la cota máxima: 1.991 sobre el nivel del mar, quedó en la parte más alta, luego la cota 1.985 también se vio; y dos líneas blancas más abajo de la cota 1.981 fue el último nivel que dejó ver el agua.
Esta semana la central Paute continuará trabajando en la madrugada con 2 turbinas; por la mañana con 4; y solo en las horas pico se utiliza la decena de unidades generadoras, indicó el gerente de Hidropaute, René Morales.
La alternativa para la generación hidroeléctrica por el momento la asumen las centrales que dependen del diésel para funcionar y de la gasolina para transportarlo, si estos combustibles no escasean por el tiempo que dure el estiaje se podrá enfrentar la falta de lluvias, explicó.
El gerente de producción aseguró que el estiaje presentado en este año es uno de los más preocupantes de los últimos 20 años y lo comparó con el presentado en 1992, cuando el entonces presidente Sixto Durán-Ballén implementó el adelanto de hora, con el fin de aprovechar la luz natural.
El funcionario expresó su preocupación por lo que puede pasar en los próximos meses, ya que la época sin lluvias se espera hasta marzo, y cada enero se registran niveles más altos de estiaje.
