El dramaturgo, poeta, pedagogo y titiritero argentino Javier Villafañe es un personaje importante en la actividad del artista cubano Luis Enrique Chacón, quien se encuentra desde hace un año dos meses en el país.

De él aprendió a ser más humano y a decir de manera sutil y mediante los recursos técnicos del teatro “de lo que adolece la sociedad, tal y como se registra en sus textos”.

Chacón perteneció a una compañía teatral y de títeres, de la cual se separó en 1995 cuando decidió convertirse en artista solista. Así encontró inmediatamente El panadero y el diablo, obra de Villafañe, en la que se aborda el enfrentamiento entre el bien y el mal.

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Esa propuesta fue la primera que presentó en un festival de monólogos y trabajos unipersonales en La Habana y ahora la ofrece en Guayaquil junto con Los pícaros burlados, también del artista argentino. Hoy brinda una función a las 11h00, en la sala de teatro Tablaraza, situada en la calle H y avenida Juan Tanca Marengo, frente al Mall del Sol.

El titiritero cubano dice que escogió, asimismo, esa otra obra de Villafañe porque “en ella se aborda la idiosincrasia latinoamericana, problema que se debe superar.
Se reflexiona en cómo la inocencia de un niño puede contrarrestar el abuso de los pícaros”.

En Tablaraza tiene previsto montar otros espectáculos infantiles, ellos son Churrinche, de Luis Marcelo Clayssen; El vendedor de globos, de Javier Villafañe y César López Ocón; y La república del caballo muerto, de Roberto Espina.

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Chacón explica que trabaja sus propuestas a partir de la gestualidad del actor, buscando movimientos del actor que se manifiesten en el desplazamiento del títere sobre el teatrino. “El resultado es un show vistoso que maneja un teatro de texto y siempre constan mínimo dos personajes sobre el escenario”.

A Ecuador llegó para brindar un curso en Quevedo sobre el manejo del títere para inculcar valores, luego se trasladó a Guayaquil, donde brinda clases de expresión corporal en el Instituto de Televisión (ITV). Además, abrió una asignatura optativa de títeres.

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La entrada a la función de hoy tiene un costo de $ 4. Reservaciones al 239-8211.

Apuntes

FILOSOFÍA DE VIDA
El cubano Luis Enrique Chacón dice que el titiritero que no se sienta niño
nunca va a poder ser titiritero. Señala que los títeres los lleva consigo a cualquier viaje que haga, incluso si no tiene presentaciones.

INICIOS
Se vinculó con la actividad artística en su niñez.
Su madre Isabel Chacón lo llevaba a toda presentación cultural y su vecino era el pintor Jesús González de Armas, quien le daba témperas y carboncillo para que el titiritero cubano hiciera sus dibujos.

SUS MAESTROS
Sus formadores fueron Martha Díaz Farré y Pedro Valdez Piña; aunque expresa que no hay mejor escuela para un titiritero que “la de tradición popular, que se alimenta de los shows que ves, de la impresión de tu público”. Se ha presentado en México, España, Argelia y otros países.

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