El canciller ecuatoriano, Antonio Parra, aseguró que viajará este miércoles a Colombia sin que aún exista un acuerdo con Bogotá  sobre la suspensión de las fumigaciones de narcocultivos y la seguridad en la  frontera, a los que llamó temas "álgidos" de la agenda bilateral.

Parra indicó este martes que durante la entrevista que sostendrá con su colega colombiana, Carolina Barco, los gobiernos "analizarán un proyecto de documento", pero enfatizó en que todavía no hay un entendimiento al respecto.

Viaja justamente "a lograr un acuerdo, creo que todavía hay espacio para eso, estoy convencido de que se podrá lograr algo".

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Según Parra, las comisiones de ambos países han "buscado acercar posiciones" y preparado un documento que "ya tendrá oportunidad de analizar conjuntamente" con Barco.

"Obviamente los puntos álgidos son la aspersión aérea de glifosato y la presencia física, perenne en la frontera, en eso que llamo, utilizando un término impropio, blindar la frontera", agregó el canciller durante una entrevista concedida a Ecuavisa.

Distanciándose de la línea de su antecesor Lucio Gutiérrez, el presidente Alfredo Palacio ha solicitado a Colombia la suspensión de las fumigaciones de narcocultivos en el paso fronterizo hasta tanto se compruebe sus efectos sobre el ecosistema y la salud humana.

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Bogotá alega, por su parte, que dispone de un estudio de la Organización de Estados Americanos (OEA) que disipa esos temores y se ha apoyado en ello para negar la petición de Quito.

El Ministro de Relaciones Exteriores de Ecuador también ha defendido la "neutralidad" del gobierno frente al conflicto colombiano, posición que exaspera al presidente Álvaro Uribe, quien insiste en captar el apoyo de los países vecinos para derrotar a las guerrillas izquierdistas.

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Sobre el particular, las autoridades vecinas insisten en que las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) asaltan a las tropas y luego huyen hacia Ecuador, donde han instalado campamentos y una red de abastecimiento, según reportes militares.

Colombia y Ecuador comparten una frontera de 586 km, a lo largo de los cuales, además de las FARC, operan paramilitares de ultraderecha, bandas del narcotráfico y contrabandistas de armas y explosivos.

En cuanto al pedido de transparencia y honradez en la gestión pública que hizo el Papa al gobierno ecuatoriano, el Canciller considera que éste no fue enfático para el Ecuador, sino que fue un llamado todo el mundo.

Finalmente, desestimó que Estados Unidos haya pedido al Ejecutivo su salida en la Cancillería, por los acuerdos con Venezuela, Cuba y Colombia; y aseguró que tiene todo el apoyo de Palacio.

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