Firmado al alimón por cristianos y musulmanes, el acuerdo llamado “La Niña de Benban” permitirá a las menores de esta aldea, mil kilómetros al sur de El Cairo y cerca de Asuán, escapar a un destino por el que pasa el 90% de las mujeres egipcias.
Pese a que está oficialmente prohibida hace una década, la mayoría de los egipcios defiende la ablación del clítoris con el fin de frenar el deseo sexual femenino y garantizar la honra y fidelidad de la mujer a su esposo.
Publicidad
Muna Amin, coordinadora del Proyecto Nacional de Lucha contra la Ablación, señaló que en Egipto se practica a niñas de entre 8 y 12 años, y que el grado de extirpación varía entre provincias.
Esta práctica ajena a la religión cristiana o musulmana, de arraigo nilótico, está generalizada en el 99% de los casos en el Alto Egipto.
Publicidad
Tras la firma del acuerdo de Benban, el Gobernador de Asuán amenazó con destituir a los médicos que realicen la ablación, dijo la secretaria general del Consejo Nacional de la Infancia y la Maternidad (CNIM), Muchira Jatab.
El problema es que numerosas operaciones de ablación son practicadas por barberos y comadronas, que responden así a la demanda de una población que prefiere no escuchar la opinión de jeques musulmanes o curas coptos respecto a que la ablación no es una obligación religiosa.