Los saudíes se preparaban este martes para inhumar a su rey Fahd Ben Abdel Aziz, que falleció el lunes a la edad de 84 años, después de una larga enfermedad y de un reinado de 23 años en un país ultraconservador y rico en petróleo.
Su hermanastro, el príncipe heredero Abdalá Ben Abdel Aziz, de 82 años, que dirigía en la práctica Arabia Saudí desde 1995, le sucedió en el trono y el ministro de Deefensa, Sultán Ben Abdel Aziz, fue designado príncipe heredero.
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El presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abbas, fue el primer dirigente árabe que llegó la noche del lunes a Riad para presentar sus condolencias este martes a la familia real. También se espera la presencia del presidente egipcio, Hosni Mubarak, el argelino Abdelaziz Buteflika y el rey Abdalá II de Jordania.
El presidente francés, Jacques Chirac, y el príncipe Carlos, heredero de la Corona de Inglaterra, también asistirán a los funerales.
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Los gobernadores locales del reino han recibido instrucciones de abrir centros para que los habitantes puedan presentar sus condolencias sin necesidad de desplazarse hasta Riad.
Las exequias del rey Fahd, que dirigió el país durante las crisis petroleras, las guerras y la amenaza del extremismo musulmán, se celebrarán en Riad.
Sus restos mortales serán trasladados a la mezquita del imán Turki Ibn Abdalá, donde se recitará una oración por los muertos, antes de ser enterrado por la tarde en presencia de sus familiares en el cementerio público de El Ud, donde reposa su padre, Abdel Aziz, fundador del reino en 1932.
Después de la inhumación, las autoridades recibirán las condolencias en el Palacio del Gobernador en Riad.
Según un portavoz del Ministerio de Interior, la seguridad será reforzada en el reino, golpeado desde mayo de 2003 por una sangrienta oleada de violencia reivindicada por la red terrorista Al Qaida.
"Estrictas medidas de seguridad rigen a todo lo largo de las carreteras por las que pasen los séquitos de los dignatarios y en el lugar de los funerales", declaró el general Mansur Al Turki. "Medidas similares se aplican habitualmente en todo el mundo en un caso como éste".
El rey Fahd, casado cinco veces, falleció en el King Faisal Specialist Hospital de Riad, donde estaba ingresado desde el 27 de mayo. Accedió en 1982 al trono de su país, que posee las reservas de petróleo más importantes del mundo.
Víctima de una embolia en 1995 que le llevó a poner el poder en manos de Abdalá, Fahd ha fallecido después de una agonía larga y a pesar de los intensos esfuerzos desplegados para prolongarle la vida.