Gilles Mimouni es un director francés de trayectoria tan bizarra como fácil de narrar: en 1996 dirigió L’appartement, meritorio y sofisticado thriller de look hitchcockiano (sin asesinatos en la ducha ni complots criminales), protagonizado por Vincent Cassel y Mónica Bellucci. Obtuvo éxito en Francia y fue estrenado en pocas salas internacionales. Nunca más se supo de él, hasta este viernes, en que su nombre se vuelve noticia en Ecuador gracias a Obsesión, nueva versión de aquella película, filmada esta vez en el Hollywood de los remakes.