El ensamble francés se presenta hoy, a las 20h00, en la sala  Experimental del Teatro Centro de Arte de Guayaquil. El grupo está formado por siete músicos.

Hace quince años se formó el grupo francés Dulce Memoria (Doulce Mémoire). 

Son siete los que integran el ensamble musical. Uno se encarga de dar vida a la guitarra, cuatro tocan instrumentos de viento, otro hace vibrar el escenario con la percusión que logra con las manos y el último canta.

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Ellos son: Marc Pontus, Pascale Boquet, Judith Pacquier, Francis Mercet, Denis Raisin Dadre, Franck Poitrineau y Bruno Caillat, quienes  tienen por tradición interpretar  música de la época del Renacimiento.

Se especializan en la italiana y francesa, combinada con  la danza que también forma parte de su espectáculo.

El grupo empezó en la región del Valle del Loira, donde el Renacimiento francés  dejó huellas profundas. Su creador fue el flautista Denis Raisin Dadre.

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Esta clase de música abarca melodías del Renacimiento francés, desde el reinado de Luis XII (1462 - 1515) hasta el de Enrique II (1519 - 1559).

Sin embargo, las investigaciones para conocer sobre esta clase de música representan una tarea continua. 

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Su representante, Xavier Fourneyron, explica que el trabajo es constante. Los músicos acuden a los museos y bibliotecas de Francia para averiguar sobre las partituras, pues “no están en los libros, no se encuentran impresas”.

La acogida que tiene Doulce Mémoire en Francia es grande  –acota– pues desde  hace 20 años hay en Europa un movimiento dedicado, específicamente, a descubrir todo lo relacionado sobre la música Barroca y del Renacimiento y el público conoce sobre ello.

Estas (melodías) se entonaban en misas, matrimonios de reyes y  también en las calles.

Los programas de Doulce Mémoire recrean escenas del Renacimiento, que van desde las ceremonias de las sepulturas de los reyes de Francia a los cantos de carnaval en la época de Laurent, el Magnífico.  Pero el grupo francés entonará hoy, a las 20h00, en la sala Experimental del Teatro Centro de Arte, solo música profana, es decir la que se escuchaba en las calles.

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 La sagrada no incluye su repertorio, precisa Fourneyron.
“La principal meta del ensamble francés es transmitir la historia al público ecuatoriano a través de la música”, resalta el representante.

Su director artístico, Denis Raisin Dadre, escribe que durante el siglo XV, la canción francesa se convirtió en la forma esencial de la música profana en los medios artísticos de Europa.

Por un lado había las canciones a tres voces, característica de la escuela de Borgoña ilustrada por Binchois, Dufay y Busnois. Por otro lado  –añade– se desarrollaba un tipo de melodía “rústica”, formulada en un estilo que las artes poéticas de la época calificaban de retórica rural y con temas populares.

Notas

Presentaciones
En Guayaquil, el espectáculo será hoy, a las 20h00, en la sala Experimental del Teatro Centro de Arte (kilómetro 4½ vía a la costa). La entrada cuesta 5 dólares.  En Cuenca, el concierto se realizará mañana, a las 20h00, en el Salón de la Ciudad del Municipio. Entrada gratuita.
Los conciertos tienen el apoyo de Francia por medio de su Ministerio de Relaciones Exteriores y Embajada y las Alianzas Francesas.

Giras y premios
Se ha presentado en EE.UU, Japón, Alemania, Portugal, España,  Colombia, entre otros.  Ha recibido una serie de premios (Diapason d’Or, Recommandé par Classica, Prix Charles Cros, Orphée d’Or, Sélection du Monde, Choc du Monde de la Musique).