Las películas de Uruguay, Argentina, Chile, Ecuador, Colombia y España son las grandes favoritas de la crítica en la disputa de los premios de la sección iberoamericana la XX edición del Festival Internacional de cine de Guadalajara.
 
Esta sección es la más importante del certamen, ya que su ganadora obtendrá el máximo galardón, dotado con 50.000 dólares, e incluye 19 filmes.
 
Las cintas que más gustaron hasta ahora son la uruguaya "Whisky", de Pablo Stoll y Juan Pablo Rebella; la argentina "Bombón, el perro", de Carlos Sorín; la ecuatoriana "Crónicas", de Sebastián Cordero; la chilena, "La última luna", de Miguel Littín y la colombiana "Sumas y restas", de Víctor Gaviria.
 
Faltan proyectarse solamente dos largometrajes a concurso en este apartado antes de la clausura del festival, el viernes,: la española "Amor idiota", de Ventura Pons -de la que llegan encendidos elogios de Madrid y Barcelona- y la argentina "Las mantenidas sin sueños", de Vera Fogwill y Martin de Salvo.
 
La uruguaya "Whisky" es teóricamente una de las que tiene más posibilidades, pues a su excelente factura e interpretación se unen los cuatro importantes premios conseguidos hasta ahora: el de la Federación Internacional de la Prensa Cinematográfica (FIPRESCI) en el último festival de Cannes; el Kikito de Oro, en el Festival de Gramado (Brasil); el Gran Premio en el certamen de Tokio y el Colón de Oro, máxima recompensa de la competición en Huelva (España).
 
 La chilena "La última luna" cuenta con la experiencia de Littín que antes que este largometraje realizó una docena de ellos, la mayoría con el reconocimiento de la crítica internacional.
 
La cinta narra un drama actual -las polémicas relaciones entre palestinos y judíos- con eficacia y, por momentos, contenida violencia.
 
"Crónicas", del ecuatoriano Cordero, fue presentada el año pasado en el festival de Cannes y aunque está considerada menos lograda y más convencional que su anterior largometraje, "Ratas, ratones, rateros", es un filme que denuncia con nitidez los problemas del periodismo sensacionalista.
 
La argentina "Bombon, el perro" obtuvo el premio de la Fipresci en el último festival de San Sebastián. Esta cinta de Sorín es una continuación de su anterior filme, la extraordinaria "Historias mínimas".
 
Tiene a favor la austera y seca manera de contar la historia característica de su director, la buena fotografía y un guión interesante. En el final, sin embargo, hay una concesión al optimismo contradictoria con el resto de la cinta.
 
"Sumas y restas", del colombiano Gaviria cuenta una historia actual -las dificultades económicas y la tentación del narcotráfico para resolverlas- de un modo un poco experimental pero con la misma soltura que lo hizo en "La vendedora de rosas" o en "Rodrigo D, no futuro".
 
Además de las mencionadas, las otras cintas incluidas en esta sección competitiva son las argentinas "El cielito", de María Victoria Menis; "Familia rodante", de Pablo Trapero; "La niña santa", de Lucrecia Martel; "Los muertos", de Lisandro Alonso; "Un año sin amor", de Anahí Berneri y "Roma", de Adolfo Aristarain.
 
También se proyectaron la película chilena "Cachimba", de Silvio Caiozzi; la colombiana "La sombra del caminante", de Ciro Guerra; la brasileña "Casi dos hermanos", de Lucía Murat; la española "Crimen Ferpecto", de Alex de la Iglesia y las mexicanas "El mago", de Javier Aparicio y "Noticias lejanas", de Alejandro Benet.
 
El jurado que deberá elegir a la triunfadora está integrado por el director mexicano Felipe Cazals, la actriz argentina Graciela Borges y el empresario y productor estadounidense nacido en Cuba Philip Alexander.