Una delegación del Partido Comunista de Rusia depositó hoy una ofrenda floral en la tumba de Stalin, en el panteón de la muralla del Kremlin, para conmemorar el 52 aniversario de la muerte del dirigente soviético.
La comitiva, integrada por unos 500 militantes según la policía moscovita, la presidió Guennadi Ziuganov, líder del partido y jefe de su grupo parlamentario, quien también colocó unos claveles en el mausoleo de Lenin en la Plaza Roja de Moscú.
"Nuestros camaradas en otras regiones del país realizan hoy actividades similares", dijo a la agencia Interfax Vladímir Kashin, vicepresidente del Comité Central de Partido Comunista de Rusia.
Según los resultados de un sondeo de opinión, divulgado hoy por Interfax, el 60 por ciento de los 1.500 rusos consultados no quiere volver a vivir bajo un régimen de corte estalinista, mientras que otro 31 por ciento sí preferiría ser gobernado con mano fuerte.
La encuesta, elaborada por la empresa Bashkirov y Asociados, reveló que el 47 por ciento de los rusos cree que Stalin desempeñó un papel positivo en la historia nacional, otro 43 por ciento opina lo contrario y el 10 por ciento restante no supo o no quiso responder.
Al analizar la relación edad-respuesta, la encuesta demostró que la admiración por Stalin es asunto de ancianos, porque el 69 por ciento se los que añoran a Stalin son mayores de 60 años.
Una reciente propuesta de erigir un momento a Stalin en el 60 aniversario de la Victoria sobre la Alemania nazi, que se celebra este año, también dividió a la opinión pública rusa casi por la mitad.
El 37 por ciento se manifestó en contra, el 29 por ciento a favor, otro 28 por ciento reaccionó con indiferencia y el 6 por ciento restante no supo o no quiso definirse.
En relación a otra iniciativa para restablecer el nombre de Stalingrado a la actual ciudad de Volgogrado, a orillas del Volga, el 61 por ciento de los encuestados rechazó la idea y tan solo un 23 de los rusos la aplaudió.
En la tumba de Stalin también depositaron ofrendas florales los líderes de otros bloques de extrema izquierda como Rusia Proletaria y el Partido Nacional Comunista del Futuro.