Un compuesto similar a la talidomida, utilizado en el tratamiento de la lepra, ha resultado ser también eficaz contra trastornos sanguíneos, según un estudio publicado este miércoles en la revista "New England Journal of Medicine".
La investigación determinó que más de la mitad de 43 pacientes con escasa producción de glóbulos rojos reaccionaba positivamente ante el tratamiento de reflimid o lenalidomida, un compuesto análogo de la talidomida.
Esa reacción positiva se definió como un estado del paciente en que ya no es necesaria la transfusión de sangre o un aumento de la hemoglobina.
Las autoridades estadounidenses prohibieron la talidomida, administrada en la década de 1950 para tratar mareos de las embarazadas, después de comprobarse que causaba malformaciones en los bebés.
Pero la Administración de Fármacos y Alimentos (FDA) autorizó nuevamente su uso en 1998, después de comprobarse que no sólo era efectiva en el tratamiento de la lepra, sino que también tenía un efecto en la terapia contra algunos tipos de cáncer en la sangre.
Sin embargo, los científicos advirtieron de que los efectos promisorios de la lenalidomida deben analizarse cuidadosamente de cara a la posibilidad de que pudiera tener efectos secundarios "clínicamente importantes".