Algunos planetas de la galaxia pueden esconder un tesoro impensado: una gruesa capa de diamantes escondida debajo de la superficie, informaron el lunes los astrónomos.
 
En nuestro sistema solar no existe ningún planeta de diamantes, pero algunos cuerpos que orbitan alrededor de otras estrellas en la Vía Láctea pueden tener suficiente carbono como para producir una capa de diamante, dijo el astrónomo Marc Kuchner de la Universidad de Princeton en una conferencia telefónica.
 
Ese tipo de planeta tendría que desarrollarse de forma distinta que la Tierra, Marte y Venus, denominados planetas de silicato, en su mayoría constituidos por complejos de silicio-oxígeno.
 
Es más probable que los planetas de carbono se formen como algunos meteoritos en lugar de como lo hizo la Tierra, que se cree que se habría condensado a partir de un disco de gas que orbitaba alrededor del Sol.
 
En el gas con carbono extra o muy poco oxígeno, se podrían formar los componentes de carbono como carburos y grafitos en lugar de silicatos, dijo Kuchner en una conferencia sobre planetas extrasolares en Aspen, en el estado norteamericano de Colorado.
 
El grafito condensado se convertiría en diamante bajo las presiones elevadas dentro de planetas de carbono, y potencialmente formaría capas de diamantes, dentro de esos planetas, de un grosor de varios kilómetros.
 
Los planetas de carbono estarían constituidos en su gran mayoría de carburos, aunque pueden tener núcleos de hierro y atmósferas.
 
Los planetas que orbitan el pulsar PSR 1257+12 pueden ser planetas de carbono, posiblemente formados por la interrupción de una estrella que produjo carbono a medida que envejecía, dijo.
 
Otros buenos candidatos para planetas de carbono pueden estar ubicados cerca del centro de la galaxia, donde las estrellas tienen más carbono que el sol.
 
De hecho, la galaxia en su conjunto se está haciendo más rica en carbono a medida que envejece, elevando las posibilidades de que todos los planetas en el futuro puedan ser planetas de carbono, dijo Kuchner.