El presidente de la Cámara Nacional de Microempresas, Wilfrido Ruiz, anunció ayer que ese gremio se ha declarado en rebeldía tributaria frente a la disposición del Servicio de Rentas Internas (SRI) que exigirá, desde enero próximo, la emisión de comprobantes de venta sin importar el monto vendido.

En rueda de prensa, el dirigente manifestó que la norma es inaplicable para 1,2 millones de comerciantes minoristas e informales del país, que generan ventas mensuales menores a 500 dólares.

Recordó que, el 11 de junio del 2002, suscribieron un acuerdo con el jefe de Estado, coronel Lucio Gutiérrez, para que el Gobierno, a través del SRI, les otorgue comprobantes de venta gratuitos y que no los obligue al cobro y desglose del Impuesto al Valor Agregado (IVA), ubicado en el 12%.

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En ese convenio, dijo, los comerciantes nos comprometimos –a cambio– a cancelar el IVA en la adquisición de materia prima para la elaboración de varios productos (calzado, ropa, juguetes). Ruiz sostuvo que cada comprobante cuesta 12 centavos de dólar, valor que se sumaría al costo de venta de cada producto.